Con esta implementación se busca formalizar y modernizar la producción, brindando a cada productor su propio código QR. De esta forma, podrán rastrear dónde está su producto y cuánto se paga en cada parte del circuito.
La iniciativa surge en un contexto desafiante para la yerba mate, que atraviesa una fuerte crisis de precios e incertidumbre institucional, con el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) actualmente sin presidencia. Desde el gobierno provincial remarcan que la falta de intervención estatal ha agravado las condiciones para pequeños productores y trabajadores rurales.
Tu opinión enriquece este artículo: