Se trata del primer lote sembrado a modo de ensayo de una variedad que contiene fibra fina y resistente, cuyo largo supera los 32 milímetros, propiedad del INTA, y que fue impulsada por las empresas Halgon SAS, Pato Pampa, el Grupo Agroperfiles y la Asociación Argentina de Productores Algodoneros (AAPA).
Todo esto surge de una alianza en la investigación algodonera destinada a la industria textil argentina, con lo que avanzará en el programa de mejoramiento genético, con la primera variedad con fibras extra largas de la Argentina.
Fue desarrollada por un equipo de investigación del INTA Sáenz Peña y se destaca por su fibra fina y resistente, cuyo largo supera los 32 milímetros. Un factor clave que permitirá sustituir importaciones, disminuir costos y producir prendas de calidad con potencial de exportación. Además, es resistente a las principales enfermedades del cultivo, lo que implica un menor uso de insumos y un menor impacto ambiental.
Un logro inédito para la Argentina ya que estas fibras sólo se producen en Egipto y Perú.
Juan José Bertolino, empresario textil y dueño de la firma Pato Pampa, dijo a NORTE Rural: "No podemos pasarnos todo el tiempo hablando en potencial, es hora que el agregado de valor en origen sea una realidad", "Es un hecho muy satisfactorio que se logre una fibra de este tipo y que no tengamos que esperar la importación de esta calidad, por eso lo celebramos", dijo.
La firma de moda masculina Pato Pampa, cuyo propietario es Juan José Bertolino, analiza invertir en el Chaco a instancias de la inminente puesta en marcha de un proceso de producción de materia prima en esta provincia, con la cual la industria confeccionaría sus prendas.
Ahora, Pato Pampa importa los hilados de las fibras de algodón extralargos de Perú y confecciona sus prendas en Villa María, Córdoba. Confían que con la SP21 cambiará esta historia.