En el Chaco, uno de los motores que impulsó la obra pública fue, en otros tiempos, la construcción de viviendas, que hoy tiene un ritmo menor.
El CEC tiene un Consejo Directivo integrado por 12 miembros, y un total de 40 empresas asociadas. En el sector, es una de las entidades que representan a las constructoras locales.
‘En 2015, en la provincia, teníamos capacidad de trabajar y estábamos en actividad 320 empresas. Hoy, en el Registro de Constructores han renovado sus carpetas solamente 120 empresas. Estamos hablando de más del 60% que no tiene capacidad para salir a trabajar en la obra pública. Esto se contrapone con el sentido de concentración que está habiendo en la obra pública en el país‘, advirtió a un medio local.
Al respecto, aseguró que además de parar su actividad, esas 200 empresas que no renovaron su registro ‘se fueron disolviendo‘. ‘Hoy no pueden contratar con el gobierno‘, sostuvo, y reveló que de un promedio de 100 a 130 trabajadores que contrataban esas compañías en años anteriores al actual gobierno; la cifra bajó y hoy trabajan con lo básico, es decir, unas 20 a 25 personas.
Viviendas
‘Tenemos más de 7000 viviendas paradas o a medio hacerse‘, acotó. Según Aleman, de ese total de viviendas paradas desde hace 2 años, cuando Mauricio Macri asumió el gobierno nacional, más de 3000 están siendo reactivadas ‘a cuentagotas‘. ‘Son del área de la Secretaría General de Gobierno‘, precisó, y explicó que cuando esas obras se relanzaron en febrero de 2016, las empresas cobraron un anticipo y el primer certificado de obra.
"A partir de ahí, se volvió a cobrar en diciembre, es decir, siete meses después. Las obras avanzaron con recursos de las empresas. Las hicimos, avanzamos siete meses y nos encontramos con un pago totalmente deteriorado por la devaluación", subrayó, y mencionó el grave problema de la falta de actualización de los valores, ya que el metro cuadrado valía en 2013-14 unos 6.000 pesos y con valores actuales alcanza los 25 mil.
Como dato de contraste, Aleman hizo notar que, si bien subió el volumen de cemento consumido en el país, ha bajado un 60% el volumen de ventas de elementos para instalaciones de electricidad que se hacen en las viviendas que se construyen. Y otro rubro relacionado que ha caído entre 2015 y 2018 es el vinculado a cañerías de armado de baños, grifería, inodoros, piletas. Mencionó allí que construir una vivienda implica el empleo de un trabajador y medio durante un año. ‘Un paquete de 50 viviendas tiene un plazo de 8 a 12 meses. Entonces hay trabajo garantizado en un grupo de 50 viviendas durante casi un año. Eso no existe más‘, lamentó.
"‘El cemento no va a la vivienda unifamiliar, que es lo que genera mano de obra. Va a obras de pavimento, diques, obras importantes en infraestructura. Pero eso no genera un consumo interno ni la absorción de mano de obra, que se ha perdido", alertó el dirigente.
Sólo 4000 obreros en actividad
En ese punto, Aleman mencionó que en el sector de la construcción se perdieron en los dos últimos años 200.000 puestos de trabajo. En tanto, en la provincia se perdieron unos 10.000 puestos entre 2015 y 2018.
"Ahora estamos un poco por arriba de la cantidad histórica de obreros ocupados, que fue en la crisis de 2001. En este momento tenemos 4000 obreros en actividad", puntualizó, y recordó que el pico en el sector fue en 2014-15, cuando había empleados 14 mil obreros.
Contra la Direccionalidad política
Por otra parte, Aleman se refirió a declaraciones del vocero de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), Gustavo Weiss, quien resaltó que en el país ‘la obra pública está muy bien‘.
En ese marco, aseguró que ‘siempre las estadísticas en Argentina y en cualquier país del mundo tienen una direccionalidad política‘. ‘Estamos en contra de esa direccionalidad política que se tiene, porque si vamos a lograr que la obra pública esté concentrada en 50 empresas en el país, nos estamos equivocando‘, alertó.
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