El estudio, mostró cómo la expansión urbana está transformando la periferia norte de la ciudad. Según este trabajo, en los últimos 20 años, zonas antes rurales se han ido urbanizando de forma dispersa.
El área estudiada abarca 1,476 hectáreas al norte del Gran Resistencia, incluyendo los municipios de Colonia Benítez, Margarita Belén y Puerto Tirol. Usando imágenes satelitales y visitas al lugar, la becaria pudo comprobar cómo el paisaje ha cambiado.
La investigación lleva el título de “La expansión urbana discontinua en la Periferia del Gran Resistencia de la Provincia de Chaco, en el período 2002 – 2022: intensificación del proceso, nuevas imágenes urbanas y sus consecuencias”.
El objetivo principal de este trabajo ha sido el de analizar cómo se está usando la tierra para viviendas y turismo en esta zona, comparando la situación entre 2002 y 2022. Para entender mejor el contexto, la becaria explica que en las últimas décadas las ciudades y regiones de todo el mundo están cambiando rápidamente. Estos cambios no siguen un patrón único y pueden ser contradictorios.
En el caso del Gran Resistencia, la gente busca satisfacer nuevas “necesidades”, como tener una casa en un lugar tranquilo fuera de la ciudad. Esto está cambiando el paisaje, convirtiendo los campos en barrios nuevos, cerrados y privados. Estos cambios no son naturales, sino que responden a las acciones de diferentes actores sociales que van moldeando cómo se usa la tierra y cómo crece la ciudad.
En las zonas periféricas se advierte el denominado fenómeno de turistificación que en la actualidad comienza a acentuarse cada vez más, acompañado de grupos poblacionales que buscan o desean “alejarse” del mundo convulsionado en que se vive en las grandes ciudades.
Este estudio es importante porque ayuda a entender cómo está creciendo la ciudad de Resistencia. Es una herramienta para las autoridades y los vecinos que les ayudará a entender el proceso y a planificar el futuro.
La investigación muestra que el crecimiento de las ciudades es el resultado de decisiones de muchos actores y grupos. Puede ser armónico, en la medida de que exista un equilibrio consensuado entre el desarrollo urbano y la preservación del ambiente.