Cuesta destacó la iniciativa y aseguró que incorporar este tipo de educación ayuda a las relaciones sociales y al desarrollo de los jóvenes. “El impacto de la inteligencia emocional demostró que el éxito obtenido en la vida de las personas es, en un 70%-80%, debido a las habilidades emocionales”, remarcó.
Asimismo, agregó que es indispensable fomentar una educación que estimule y desarrolle la salud emocional y satisfacción personal, la tolerancia a la frustración y la automotivación.
Además, alentó al trabajo en conjunto de todos los sectores sociales para implementar un modelo educativo que permita construir una sociedad mejor. “Queremos que la educación emocional sea parte de la enseñanza de nuestros jóvenes, para construir entre todos una sociedad más comprensiva y tolerante”, aseguró.
Por otra parte, la ley establece al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología como autoridad de aplicación y el que deberá conformar una comisión de educación emocional integrada con profesionales de diferentes disciplinas que tengan conocimientos y/o experiencia sobre la temática.
Esta comisión será la encargada de realizar capacitaciones y una actualización especializada de los educadores, trabajadores sociales, docentes, psicólogos y demás operadores comunitarios.