Uno de los sectores más perjudicados por el aislamiento social, preventivo y obligatorio para prevenir el contagio de COVID-19, fueron los gimnasios y centros de entrenamiento que diariamente recibían a miles de clientes que realizaban actividades físicas de todo tipo. Sin poder abrir sus puertas, muchas pequeñas empresas se encuentran al borde de la quiebra y subsistiendo solo con el alquiler de elementos de entrenamiento y cursos virtuales, los que pueden, a través de las redes sociales. Para poder mantener esta actividad que genera empleo directo e indirecto para más de dos mil chaqueños, solicitan al Estado medidas urgentes para afrontar la crisis.
Hugo Paris, propietario y profesor del Colo´s Gym, explicó que todos los gimnasios de distintas especialidades se encuentran atravesando una crisis financiera muy profunda y preocupante por la falta de actividad, lo que obligó a conformar un grupo de más de 130 propietarios para ponerse en contacto con autoridades públicas y solicitar asistencia inmediata.
El emprendedor chaqueño explicó que este grupo está conformado por gimnasios de todo tipo, como de zumba, crossfit, funcional, boxeo, artes marciales, complementos y aérobicos, que desde el inicio de la cuarentena cerraron sus puertas y hoy se ven imposibilitados de afrontar gastos de alquiler, salarios del personal, impuestos, cobertura médica y servicios básicos. “Nos reunimos con el gobernador, con el intendente municipal y autoridades del Ministerio de Salud para analizar los pasos a seguir y encontrar una solución para poder subsistir y estamos a la espera de una respuesta”, aseveró.
"Colo" Paris explicó que para subsistir, en la actualidad muchos propietarios decidieron implementar el sistema de clases virtuales o en línea, a través de las redes sociales, así como también se encuentran alquilando el equipamiento como barras, discos, bancas y equipamiento, para que sean utilizados por los clientes en sus hogares. “Todavía no tenemos una fecha posible para retomar la actividad y eso lleva a que los gimnasios busquen la manera de poder subsistir. Esto es nuevo para todos y lamentablemente nuestro sector es considerado de alto riesgo por lo que seguramente vamos a ser los últimos en tener autorización para poder trabajar”, manifestó. Agregando que “a nivel nacional, a los gimnasios nos tienen vistos como una actividad menor y es hora de que nos comiencen a valorar como una actividad importante. Nosotros recibimos diariamente a muchas personas que tienen que realizar algún tratamiento de rehabilitación, o que realizan actividad física para evitar estrés o lograr el bienestar personal”.
Teniendo en cuenta esto, Paris explicó que se solicitó asistencia financiera al Gobierno por medio de subsidios o créditos blandos similares a los que están recibiendo otros sectores como el comercio. Para esto, es necesarios la implementación de un sistema alternativo, ya que muchos propietarios de gimnasios no cumplen con los requisitos necesarios para acceder a este tipo de préstamos bancarios. “Al no estar en el mismo rubro de los comercios, es mucho más difícil acceder a esta línea crediticia, por lo que solicitamos algo específico para nuestro sector”, aseguró.
Al no poder abrir sus puertas, los gimnasios piden estar incluidos en la asistencia financiera anunciada por el Gobierno.
Otro de los puntos abordados por este grupo de propietarios de gimnasios auto convocados, fue la elaboración de un protocolo de funcionamiento con autoridades del Ministerio de Salud de la provincia, para cuando se flexibilice el aislamiento social para este sector y puedan retomar la actividad. Es por eso que junto a la médica deportóloga y directora de Coordinación General de Programas de Salud, Sofía Dimitroff Petcoff, se encuentran preparando una propuesta de protocolo de funcionamiento que esté adaptado a la realidad de los gimnasios de la provincia, que muchas veces no cuentan con el mismo espacio físico de instituciones de otras provincias como Buenos Aires y Córdoba. “Buscamos que esos protocolos sean similares, respetándose todos los cuidados sanitarios necesarios pero teniendo en cuenta la escala y dimensiones que manejamos acá en la provincia, donde no es común tener mega gimnasios con grandes superficies e infraestructura”, explicó Paris.
Vale la pena mencionar que la Cámara Argentina de Gimnasio, entidad que aglutina a más de 850 centros de entrenamiento de todo el país, estableció un protocolo de pautas sanitarias diseñadas para neutralizar las posibilidades de contagio y a tono con especificaciones emitidas por los ministerios de Salud y Trabajo. El mismo incluye límites en la cantidad de usuarios acorde a la cantidad de metros cuadrados del gimnasio, política de acceso vía turnos y sistemas de check-in previo, límites en la cantidad de usuarios en los salones de clase con demarcación en el piso respetando la distancia recomendada: 1 socio cada 4 metros cuadrados. También suspensión de toda clase que implique contacto entre los socios (artes marciales o boxeo), redistribución de equipamiento con 2 metros de distancia entre cintas, bicicletas y todo equipo de musculación; obligación de utilización de protección mediante barbijos a toda aquella persona que concurra y/o trabaje en el establecimiento.
“Nosotros estamos trabajando junto a la doctora Petcoff en un protocolo acorde a lo que es el Chaco, que nos permita poder volver a trabajar lo antes posible a través de una atención personalizada para por lo menos abrir nuestras puertas, poder sobrevivir y aunque sea recaudar algo para afrontar los gastos fijos y esenciales. El mismo será presentado ante las autoridades provinciales, que luego será enviado al Ministerio de Salud de la Nación para ser aprobado o no”, concluyó.