La terminal portuaria fue concebida como un nodo multimodal estratégico dentro del corredor bioceánico, buscando mejorar la competitividad regional mediante la reducción de costos logísticos. Se estima que permitirá ahorrar alrededor de 1.000 dólares por contenedor exportado, lo cual representa un diferencial clave para las empresas locales. Además, el puerto está equipado con instalaciones modernas como aduana, SENASA, infraestructura contra incendios, servicios esenciales, y conectividad digital.
Integrado con el Parque Industrial de Ituzaingó, el puerto impulsará una sinergia orientada a generar empleo, atraer inversiones y escalar la producción regional con mayor valor agregado. Solo en su primera etapa, se proyecta la creación de 60 empleos directos y más de 300 indirectos, que se sumarán a los miles de puestos previstos en el ecosistema industrial circundante.
La infraestructura está diseñada para operar a largo plazo, con visión estratégica. Ya se cuenta con un proyecto ejecutivo para conectar el puerto con la red ferroviaria, lo que potenciaría aún más la integración logística y permitiría ampliar el acceso a mercados internacionales, especialmente a través del Pacífico. Esto posiciona a Corrientes como un nuevo actor logístico relevante en el marco del Mercosur.
Este hito marca el inicio de una nueva etapa para la producción regional, con impacto directo en los sectores forestoindustrial, agropecuario y de servicios. Con el puerto como motor, se abre la oportunidad de transformar a Corrientes en un centro logístico competitivo, eficiente y sostenible, preparado para escalar su proyección internacional en los próximos 50 años.