Uno de los pilares para que esto suceda, ha sido la promoción e incentivo a la certificación de las plantaciones. Asimismo, la conservación de especies nativas de manera complementaria con la producción forestal ha permitido conservar la biodiversidad de flora y fauna.
Es imposible pensar en un desarrollo productivo forestal sin cuidar el medio donde se encuentra. Es por ello por lo que la actividad forestal en Corrientes se hace de la mano de prácticas amigables con el medio ambiente y las personas. Hay certificaciones que avalan ese trabajo y esfuerzo que con 290 mil hectáreas ya suma más de la mitad de las plantaciones de la provincia.
Ejemplo de esto es la protección de zonas de alto valor ecológico, la implementación de sistemas agroforestales, el manejo integrado de plagas y enfermedades y la reducción progresiva del uso de agroquímicos.