El sistema combina un generador fotovoltaico de 910 Wp, un banco de baterías de 24V y 275 Ah y un controlador MPPT de 2 kW, logrando cubrir una demanda anual aproximada de 898 kWh. Según las simulaciones, puede operar una heladera de 160 litros junto con otros consumos domésticos, alcanzando una fracción solar del 100%.
Para validar el diseño, se construyó un prototipo experimental monitoreado en tiempo real, que demostró su viabilidad técnica y económica incluso en días nublados, y permitió alimentar cargas adicionales como iluminación, ventilación y dispositivos electrónicos.
El proyecto funciona además como plataforma de formación práctica para estudiantes, combinando innovación tecnológica con desarrollo regional. Los avances fueron presentados en las jornadas de divulgación científica de la UNNE y en congresos del Mercosur, destacando el potencial de la energía solar en comunidades aisladas.
La Isla Apipé Chico, en Corrientes, fue seleccionada como sitio piloto, y se proyecta ampliar el modelo a otras localidades rurales, integrándolo con programas de electrificación sostenible. El equipo de investigación considera que el prototipo ofrece un modelo replicable, eficiente y adaptable a la realidad de distintas regiones del país.