Pero siempre me pregunté ¿Qué son realmente las Relaciones Públicas?¿Tiene acaso que ver con una rama de la publicidad, del marketing, de los eventos, del periodismo? ¿Son las personas que reparten entradas para boliches los relacionistas públicos? ¿O bien las personas que organizan fiestas pueden llevar el título?
Debemos entender que hablar de esta disciplina significa dejar en claro, la importancia de la comunicación como base de la misma. Como un proceso dinámico donde intervienen una o más partes, en un contexto determinado, con un mensaje concreto, sobre las variables de relación bidireccional.
También debemos saber que se trata de acciones ligadas a las decisiones directivas de una organización.
Entonces, las Relaciones Públicas son una función directiva que evalúa actitudes públicas, identifica políticas y procedimientos de un individuo o una organización con el interés del público, y planifica y ejecuta un programa de acción para lograr la comprensión y aceptación del público.
Hablamos de una especialidad que establece una relación de comunicación y cooperación mutua entre una organización y sus públicos.
Por otro lado, las Relaciones Públicas no se improvisan, son el esfuerzo continuo y organizado por mantener una relación armoniosa basada en el intercambio de opiniones y de información.
Dada la complejidad de su proceso no se desarrolla espontáneamente, sino que ha de ser planeado y ejecutado en un proceso continuo que se compone de cuatro etapas:
Investigación: ¿Cuál es el problema o la situación? Este es el primer paso en cualquier programa de relaciones públicas, es necesario recopilar información y datos, e interpretarlos. Se podrá desarrollar un programa de comunicación eficaz, si se lleva adelante este proceso.
La Planificación: (planificación de un programa) ¿Qué se va a hacer al respecto? Es primordial que se piense detenidamente que hay que hacer, con un orden y secuencia establecido previamente.
La Comunicación: (ejecución) ¿Cómo se informará al público? Es la puesta en práctica en la comunicación con los públicos. A medida que se desarrollan las tareas descriptas en la etapa de planificación se hace un control de cada gestión para corregir las posibles desviaciones del Plan.
La Evaluación: ¿Se logró llegar al público? ¿Cuál fue el efecto? En esta etapa se analizan los resultados y la eficacia de las técnicas empleadas. Es el momento de analizar éxitos y desaciertos para llegar a una conclusión final sobre lo actuado
Teniendo en cuenta lo expresado en los párrafos anteriores, hay que saber que las relaciones públicas no son una varita mágica, es decir, no podemos esperar resultados inmediatos. Las estrategias que planifica un relacionista público son a largo plazo, sostenibles en el tiempo, que permita a la organización o individuo observar y medir los impactos de la planificación.
Como ya lo dijimos su principal misión es generar un vínculo entre la organización, por medio de la comunicación, con las partes interesadas, además de convencer y formar una imagen positiva.Para llevar a cabo un plan de Relaciones Públicas el profesional se servirá de otros métodos, teorías y herramientas como publicidad, marketing, diseño, comunicación, política, psicología, sociología, periodismo, entre otras ramas y profesiones. Es importante el intercambio con otras áreas dentro de la comunicación como las nombradas anteriormente. Si bien cada una tiene fines totalmente diferentes, debe existir una coherencia entre los mensajes emitidos para alcanzar los objetivos organizacionales planteados.
Desde otro punto su interacción con los medios de comunicación (diarios, revistas, televisión, redes sociales, sitios web, cine, radio), es fundamental para poder llegar a los públicos meta. Estos permitirán materializar el mensaje clave emitidos por la organización, que serán establecidos en el plan.
Las Relaciones públicas, como vemos no son las actividades señaladas en el primer párrafo de este artículo. Es mucho más que eso.
Su beneficio sobre las organizaciones o individuos son numerosas como indispensables para alcanzar los objetivos de cualquier organización. Representan la nueva era en las comunicaciones: respetuosa, centrada en el diálogo y en el destinatario; dirigidas al punto más elevado del interés común.