Según datos de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo, entre noviembre de 2023 y mayo de 2025 se perdieron 4.699 empleos privados formales en la provincia y casi 100 mil a nivel nacional. A este escenario se suma una creciente informalidad, impulsada por la necesidad de reducir costos frente a un contexto económico adverso.
Aunque la inflación muestra signos de desaceleración, los aumentos en tarifas de energía, combustibles, logística y servicios siguen afectando los márgenes de rentabilidad de las pymes. “Las ventas han caído en todos los rubros y no hay perspectiva de mejora en lo inmediato”, afirmó Scaglia, al tiempo que remarcó el impacto negativo de la paralización de la obra pública y el encarecimiento de la construcción sobre el empleo en ese sector.
Desde el sector empresario cuestionan además el enfoque de la gestión nacional, que (según Scaglia) está centrado en sectores como minería, energía y petróleo, dejando de lado al comercio, las pymes y el agro.
“Si bien hubo un fuerte respaldo inicial al gobierno de Javier Milei por su discurso contra la inflación, hoy predomina la incertidumbre. El Gobierno tiene una visión muy porteñocéntrica, no escucha al interior y eso impide que podamos planificar”, concluyó.