Cada suscriptor a Pinta Libre paga en Argentina $ 250 mensuales a cambio de poder tomar todos los días del mes (sí, todos) un cerveza en alguno de los bares adheridos al sistema, en un esquema ganar-ganar simple: los bares “mueven” clientes regalando una cerveza a sabiendas que posiblemente el consumo sea mayor.
Con operaciones en Buenos Aires, Rosario, Mar del Plata, Córdoba, Santiago de Chile y Montevideo (además de Barcelona, España), Pinta Libre busca ahora franquiciados para estas ciudades y cualquier otra con más 100.000 habitantes.
¿Por qué “abre” el negocio? Porque Matías Mindlin y su equipo apuestan a crecer rápido sin caer en las manos de grupos inversores concentrados y opta por el modelo de franquicias.
La propuesta es clara: por cada suscriptor que el franquiciado sume al sistema recibe 3 de cada 4 pesos de ingresos; así, si logran 1.000 suscriptores de $ 250, de los $ 250.000 que se generan cada mes $ 187.000 quedan para el franquiciado. Si en cambio fueran 10.000 los ingresados al sistema, la cifra suma un interesante 0 al final.
Las franquicias de Pinta Libre se definen como un “negocio en una caja“: la empresa les provee el paquete completo de app y web propia, formación, el soporte a los usuarios y la gestión del marketing. El franquiciado debe operar localmente la marca, logrando sumar bares a la iniciativa y captar clientes finales, retroalimentando el sistema.
“El modelo de Pinta Libre te permite generar un ingreso recurrente mensual desde el primer día, recuperando tu inversión a corto plazo. Los montos necesarios para montar tu franquicia son realmente bajos. Es una excelente oportunidad para nuevos emprendedores o para aquellos que quieren pasarse al ecosistema startup”, resume Matías Mindlin, fundador de Pinta Libre.
Costo de ingreso
- Ciudades de hasta 100.000 habitantes - US$ 5.000
- Ciudades de 100.000 a 500.000 habitantes - US$ 7.500
- Ciudades de 500.000 - 1500.000 habitantes - US$ 10.000
- Ciudades de más de 1.500.000 habitantes - US$ 15.000