Durante una entrevista, De Paoli explicó que el precio de la nafta súper aumentó drásticamente, pasando de 350 pesos por litro en noviembre pasado a casi 1.100 pesos en la actualidad.
"Desde el Gobierno Nacional se han tomado decisiones para remover subsidios, lo que ha impactado significativamente en el precio de los combustibles", indicó De Paoli.
Además, anticipó un nuevo incremento de aproximadamente un 3% para agosto, aunque advirtió que este pronóstico dependerá de las fluctuaciones del dólar oficial. "El dólar sigue variando a una tasa del 2% mensual, y eso se está trasladando al público con cierta frecuencia", agregó.
El experto también se refirió a la caída del consumo de combustibles, que en junio de este año se redujo un 12,05% en comparación con el año anterior, marcando la séptima caída mensual consecutiva.
“En ciertas áreas, la caída ha sido de hasta un 35%. Todo depende de la situación geográfica y los ingresos de las familias”, explicó. "En el caso del Chaco, vender un litro a 1.100 pesos es mucho más complicado que a 350 pesos."
La situación económica en el país, según el especialista, se asemeja a un proceso de estanflación, que combina estancamiento económico con inflación. "Estamos viendo una caída del poder adquisitivo que afecta a la población en general", afirmó. "Una vez que se recupere la capacidad de compra, se espera un rebote económico".
Además, De Paoli hizo hincapié en que el componente impositivo representa un 43% del precio de un litro de combustible.
"En noviembre, los vecinos cruzaban a Argentina para cargar combustible. Hoy, la paradoja es que los argentinos están empezando a cruzar a Paraguay o Brasil debido a los precios más bajos allí", comentó, añadiendo que la inflación en Paraguay es significativamente menor que en Argentina.
Finalmente, De Paoli concluyó con cierto tono de resignación que "lamentablemente, hay que esperar hasta el próximo aumento", refiriéndose a la continua inestabilidad en el mercado de combustibles.