Con un costo de hasta $ 257 por litro, la venta de nafta premium registra una caída en el NEA y como contracara, por una cuestión de altos costos, los conductores se están inclinando a cargar nafta súper en sus coches.
“Los cupos de ese segmento están al tope y si no escasea aún es porque ocurren dos fenómenos: bajó el consumo de los combustibles en general y el campo no está demandando nafta súper ni gasoil porque por la sequía se redujo notoriamente la cosecha durante esta zafra”, dijo a Primera Edición el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Nordeste (Cesane), Faruk Jalaf.
A lo anterior, agregó que “pese a todas las gestiones que hemos hecho, seguimos teniendo los mismos cupos que el año pasado; que por supuesto no alcanzan, pero no hay faltante porque cayó el consumo”.
El producto premium no se vende prácticamente. Las petroleras mandan productos premium que no se pueden vender, pero igualmente exigen la comercialización de la misma. Sin embargo, la situación económica cambió mucho las cosas. Los consumidores trasladaron el consumo de los productos premium a los productos tradicionales y, ante el aumento de esa demanda, no alcanza el stock.
Por otra parte, para el 15 de este mes aproximadamente, las petroleras aplicarán un incremento de 3,8% al valor actual de la nafta y el gasoil, como parte del acuerdo entre ellas y la Secretaría de Energía, que había establecido subas mensuales del 4% e, incluso, por debajo de ese promedio para diciembre, enero y febrero; que ya fueron aplicadas.
La expectativa del Gobierno, en un año electoral, en el que buscará domar de todas las maneras posibles a la inflación, es que haya una renovación del acuerdo de Precios Justos para los carburantes.
De acuerdo a los rumores en el sector, los cuales no están confirmados, podría haber una renovación del acuerdo por cinco meses y se habla de que sería por un 3,5% de aumento mensual.
El acuerdo Precios Justos para el combustible, que aún se encuentra vigente, fue firmado a fines de noviembre y, como contrapartida al tope mensual de aumentos, el Gobierno brindó a las petroleras una garantía de acceso a divisas estadounidenses para las empresas; en particular para sostener el stock de los lubricantes, además de realizar reducciones temporarias de la carga impositiva.