Desde su fundación en 2005, Copap apostó por una apicultura sustentable y el fortalecimiento del cooperativismo local. Hoy ofrece una variedad de presentaciones comerciales —frascos, sachets individuales y blísteres— pensadas para diferentes públicos y espacios de consumo, desde kioscos escolares hasta hoteles y cafeterías, lo que permite expandir la presencia de la miel chaqueña en nuevos mercados.
Con infraestructura propia habilitada por Senasa y alimentada por paneles solares, la cooperativa garantiza inocuidad, trazabilidad y buenas prácticas en toda la cadena. Además, brinda servicios de fraccionado a 12 marcas privadas, fortaleciendo su rol estratégico en la región y articulando con instituciones como INTA y Senasa.
La inclusión de jóvenes y mujeres en los distintos eslabones productivos es parte del ADN de la organización, que hoy gestiona más de 800 colmenas orgánicas certificadas y proyecta incorporar 600 más, según destaca un informe publicado por Diario Norte. Este modelo combina sostenibilidad ambiental, diferenciación comercial y construcción de capital social con recambio generacional.
Una de las acciones destacadas del año fue la organización de la primera Expo Apícola de los Humedales del Chaco, realizada en abril en Resistencia. El evento superó expectativas y se posicionó como un espacio clave para la promoción, formación y comercialización de mieles del NEA, reafirmando el protagonismo de Copap en el escenario apícola nacional.