Con base operativa en Oberá, las instalaciones de Morada del Ava serán el centro de operaciones del sistema, que contará con logística propia para cubrir todo el territorio misionero. El proceso de cremación será completamente trazable, con registros en cada etapa y entrega certificada de cenizas, marcando un antes y un después en la forma de despedir a los animales de compañía.
El proyecto no se limita a la incineración: incluye espacios de homenaje, rituales simbólicos y acompañamiento emocional para los tutores. La visión es ofrecer un servicio profesional y respetuoso, que supere el vacío legal y sanitario de prácticas informales, como el entierro en patios o terrenos baldíos, aún frecuente en más del 80% de los hogares.
Desde ARKAZ, empresa con experiencia en el rubro Petcare, explicaron que la respuesta al testeo inicial fue contundente: alta participación y fuerte respaldo por parte de las familias. El servicio apunta a un segmento cada vez más consciente del bienestar animal y del impacto ambiental de sus decisiones, alineado con tendencias internacionales.
Por su parte, Morada del Ava (firma con más de una década de trayectoria en servicios funerarios) suma este nuevo eje a su estructura existente, que incluye un cementerio parque y servicios personalizados. La nueva unidad de negocio se apoya en infraestructura de alta gama y experiencia en el acompañamiento en momentos sensibles.
Con esta propuesta, Misiones se posiciona como pionera en el desarrollo de servicios funerarios para mascotas en el NEA, incorporando valor agregado, empleo especializado y soluciones ambientalmente responsables. Una respuesta concreta a un cambio cultural en marcha, que también representa una oportunidad económica de escala regional.