Entre las múltiples propuestas que ofrece la Bienal Internacional de la Escultura 2022, que se realiza en el predio del Parque Intercultural 2 de Febrero hasta el próximo sábado 23 de julio, se encuentra un espacio dedicado a celebrar el Séptimo Encuentro de Artesanos de Pueblos Originarios, que reúne a hermanas y hermanos de distintos pueblos de la provincia del Chaco, como Fontana, Sáenz Peña, Pampa del Indio, Colonia Aborigen, Napalpí y la región Impenetrable, entre otros.
Faustino Ciro (de Paraje Techat 1 de Miraflores) y Saturnina Acevedo (de Juan José Castelli), pertenecen a las comunidades Wichí y Qom respectivamente, pero su particularidad es que, por primera vez, se encuentran participando como artesanos de una edición de la Bienal, comentaron en diálogo con Agencia Foco
Faustino cuenta: “Este es mi trabajo (mientras lo exhibe), soy wichí y hago sombreros, canastos y bandejas”. Su arte comenzó desde hace unos 15 años, cuando “miraba a los compañeros qom como trabajaban con la palma y entonces, agarré yo también”, relata.
Su trabajo en chaguar y palma fue reconocido a nivel provincial en el año 2021, en Quitilipi. “Saqué un premio y desde entonces, fue aumentando mi trabajo”, dice emocionado. Su familia se conforma por su esposa y cuatro hijos, a quienes también les enseña el trabajo meticuloso y manual que realiza con sus manos.
En su tercer día de exposición, reconoce que “la gente pregunta precios y va viendo. No es para vender rápido, no. Pero va yendo”, dice en relación a las ventas. Y espera que “siga más adelante la invitación”, mientras atiende a una pareja que se acerca a consultar a su stand por unos sombreros.
Más adelante, está el stand donde trabaja Saturnina Acevedo, de Juan José Castelli. Con la cabeza gacha y concentrada, realiza un sombrero más para sumar a su puesto. “Hago canastos y sombreros en hoja de palma”, cuenta.
Sus productos son variados en tamaños y formas. “Es que desde hace cinco semanas que preparo mis trabajos”, confiesa. Rondando los 68 años, dice que “desde hace muchos años soy artesana, me enseñó mi mamá, pero ella ya falleció. Tengo hijos, nietos y ellos también hacen todo”. En relación a las ventas, cuenta que en Juan José Castelli vende mucho sus productos “a turistas cuando llegan y nos piden, en vacaciones sobre todo”, mientras espera poder tener una exitosa venta en este encuentro.
Las artesanías Qom y Wichí de nuestros pueblos originarios, pueden disfrutarse en el espacio dedicado a las comunidades, con materiales de calidad y a muy buenos precios. Una oportunidad para recorrer, investigar y aprender más de nuestras hermanas y hermanos que ofrecen su arte en vivo y están dispuestos a explicar los procesos y su trabajo diario.