Ricardo Eiden, secretario del Centro de Industriales Panaderos del Chaco, comentó la situación laboral y productiva de las panaderías en contexto de pandemia. Eiden, quien además es propietario de un emprendimiento panadero, aseguró que se adoptaron medidas de higiene y bioseguridad como "el uso obligatorio de barbijo o tapaboca, que no ingresen más de dos clientes al local, es decir que los demás esperen afuera al aire libre, y así tanto en atención como en la producción, lo que se suma a las medidas de protección de siempre".
En ese contexto, reveló que la pandemia afecta "a todo el sector comercial", y las panaderías no son la excepción.
"Vivimos una situación complicada. Tanto las panaderías como los comerciantes del centro vivimos de la compra del 'ya que estoy', es decir, compran algo aprovechando que están en el centro. Si la mayoría está en su casa, no compra 'ya que está' en el centro. Hoy el centro está complicado tanto para comerciantes como para que entren clientes", expresó.
"La panadería es un rubro en que el cliente venía hasta tres veces por día. Hoy viene una vez cada dos días. Si una persona consume medio kilo de pan, no va a pagar los $ 80 de delivery, la mínima, por esos $ 40 de pan. Por ahí se activa el fin de semana, porque compra facturas o una torta, se juegan un poco más, y ahí sí justifica el mandado", aseguró Eiden.
Es así que con este contexto, los clientes no compran demasiado en las panaderías, "y si compran tres kilos de pan, ya no vuelven en toda la semana y estamos en la misma", dijo el empresario y sentenció una realidad que atraviesa al sector: "Hoy estamos trabajando al 50% de nuestra capacidad, vendemos la mitad de lo que producíamos antes".