La planta de residuos abrió sus puertas hace seis años en la provincia del Chaco. Desde entonces brinda soluciones ambientales en el manejo de desechos de empresas, como estaciones de servicios, lubricentros, constructoras, demás industrias y gastronómicas en ocho provincias, generando 62 empleos directos.
El director de Parino Group, Gerardo Parino, explicó que la planta cumple una importante función ambiental en la región del NEA, ya que acopia y pre-trata residuos especiales y peligrosos.
“Los líquidos que se tratan en las cámaras de estaciones de servicios, decantadoras o industriales deben tener un proceso y pretratamiento que es lo que se hace en la planta. Estos residuos antes iban directamente a las redes cloacales sin ningún tipo de tratamiento, generando problemas de salud ambiental”, graficó el empresario, y resaltó que la firma trabaja en un proyecto de ampliación para tener mayor capacidad de prestación.
Marcando el impacto de la planta en la salud ambiental de los chaqueños, en la provincia hay 120 generadores de residuos peligrosos inscritos, los que son constantemente controlados.
De los 62 trabajadores, 10 están dispuestos en Puerto Vilelas. Estos hacen un recupero del 70% de agua dispuesta en los hidrocarburos, agua que se destina a usos productivos como la limpieza de la planta. La firma tiene la iniciativa de extender ese recupero a todas las empresas del parque industrial.