La estrategia apunta a atraer nuevos inversores mediante un esquema de franquicias acompañado por la empresa, que incluye facilidades en equipamiento, cámaras de frío y maquinaria. La expansión se concentra en el NEA, con fuerte presencia en Chaco, Corrientes y Formosa, y un reciente desembarco en Misiones, donde ya abrió una sucursal y prevé sumar al menos dos más.
Desde el punto de vista del mercado, el sector porcícola muestra un amplio margen de crecimiento. El consumo per cápita en Argentina ronda los 18 kilos anuales, muy por debajo de países como España, donde supera los 50 kilos. Además, se registra un cambio estructural en la demanda: hoy el 80% del consumo corresponde a carne fresca, un dato clave para el posicionamiento comercial de la compañía.
En el plano productivo, Frigoporc combina carne fresca y elaborados, respaldada por un criadero intensivo con 2.500 madres activas, una escala relevante para la región. La empresa emplea de manera directa a 184 personas e indirectamente a otras 250, consolidando su impacto en la economía local y en la cadena de valor porcina.
Con una visión de largo plazo, la firma busca romper mitos sobre el consumo de carne de cerdo, ampliar mercados y acompañar el crecimiento del sector. La combinación de inversión, eficiencia productiva y expansión comercial posiciona a Frigoporc como un caso de desarrollo empresarial en el NEA, en una industria que aún se encuentra lejos de su techo.