Sin embargo, en el acumulado del año 2020 y tal como se viene observando en los últimos meses, la región del NEA registra la inflación más alta del país con un alza de los precios que llega al 21,2%; y también lo hace en términos interanuales (agosto 2020 vs agosto 2019), con el 44,1%, en base a datos del INDEC.
El relevamiento de precios por parte del INDEC continúa teniendo muchas limitaciones a partir de las restricciones existentes de circulación y de actividades.
En julio, el relevamiento presencial de precios del organismo alcanzó al 25,8% del total nacional, a partir de "decisiones jurisdiccionales de retrotraer a fases de emergencia sanitaria más restrictivas", pero en agosto el mismo volvió a descender y alcanzó apenas al 14% del total nacional; de esa manera, el relevamiento del IPC se ve afectado no solo por el hecho de que no hay una apertura del 100% de las actividades por el momento, y también por esta situación de limitación a la hora de relevar de manera presencial los precios.
En ese marco, y por tercer mes consecutivo, la región del Nordeste tuvo en agosto 2020 un alza del IPC por encima de los dos puntos: 2,3%; comparada con el resto de las regiones del país, tuvo el menor incremento del índice, algo que no se observaba desde hace varios meses. El mayor incremento lo tuvo la Patagonia con el 2,9.
Ante dicho incremento, la inflación acumulada del 2020 en el NEA alcanza el 21,2%, la más alta de todo el país (seguida por el NOA con 20,6%), algo que viene sosteniendo desde inicios de año. Un dato a considerar es que, a esta misma altura del año, pero de 2019, la inflación acumulada del NEA era del 32,4%.
A su vez, la variación interanual del índice de precios de la región en agosto respecto al mismo mes del año anterior, nos muestra un alza de precios del orden del 44,1%, y de ese modo, tuvo una importante desaceleración respecto al mes anterior, que había sido del 47,1%. Además, también en este punto el NEA tiene la variación más grande del país (seguida de la región Pampeana, con 42,1%).
Tanto en el escenario mensual de agosto, como en el acumulado 2020 y el interanual, se observa que los precios de los bienes crecen bastante por encima que los precios de los servicios: el congelamiento de tarifas que está vigente desde hace ya varios meses explica en mayor medida esta situación. En agosto, los bienes crecieron 2,7% y los servicios apenas un 1,0%; en el acumulado del año 23,1% vs 14,3%, mientras que, a nivel interanual, los incrementos fueron del 48,1% y 31,1% respectivamente.
Además, cabe destacar el papel de los precios regulados en este escenario: si vemos el acumulado del 2020, los precios regulados (como el combustible, tarifas de electricidad, gas y agua, el transporte público, telefonía e internet y cigarrillos, entre otros) crecieron apenas un 10,2% en el NEA; a su vez, los precios estacionales (frutas, verduras, ropa, turismo) lo hicieron en un 32,3% y el IPC Núcleo (resto de los grupos) creció un 21,2%.
A partir de esto, es preocupante el descongelamiento de los precios regulados: el combustible ya salió de la fase del congelamiento y su impacto se verá en los datos de septiembre. Un eventual descongelamiento de tarifas de servicios públicos, aunque gradual, podría impactar de forma muy fuerte en el IPC general, considerando además que el IPC Núcleo muestra un nivel de incrementos bastante acelerado.