Cannabis sativa es una planta de fácil cultivo, cuyos principios activos se encuentran en los tricomas. Se la utiliza desde la antigüedad con fines medicinales, en alimentación, elaboración de fibras y por sus propiedades psicoactivas (debido a la presencia de THC).
Más recientemente, a nivel mundial hay un creciente interés en esta planta, debido a las propiedades benéficas de los cannabinoides, en particular el cannabidiol (CBD) como antioxidante, antiinflamatorio y antimicrobiano, así como propiedades ansiolíticas, neuroprotectoras y anticonvulsivas, por lo que la industria está desarrollando productos con bajo THC y alto CBD.
En este contexto, un equipo interdisciplinario integrado por investigadores de la UNNE y CONICET consideró viable impulsar un proyecto para desarrollar un snack a base de pulpa de frutilla y mango "criollo", dos frutos que se producen en la región del NEA, adicionados de extracto enriquecido en cannabidiol (CBD).
Para ello, se trabajará con plantas de Cannabis sativa producidas en la región. Se cuantificará el contenido en los principales cannabinoides, THC y CBD, y se extraerán los principios activos con solventes optimizando el proceso.
La investigación será desarrollada por un equipo conformado por docentes investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE e integrantes del Instituto de Química Básica y Aplicada del Nordeste Argentino (IQUIBA, UNNE-CONICET).
La directora del proyecto explicó que el mango criollo y la frutilla, son frutos que tienen un buen sabor y contenido de azúcares, pectinas y otros compuestos bioactivos, por lo que son apropiados para la elaboración de snacks dulces.
Inclusive podrían utilizarse los frutos que son descartados en el mercado en fresco por no reunir los requisitos de calidad para su venta como tales, representando una alternativa para su aprovechamiento.
Actualmente en el país la mayoría de las personas que ingieren Cannabis por motivos medicinales lo hacen a través de la ingesta directa de los extractos. Por lo tanto, la posibilidad de ofrecerlo en forma de snacks representaría una nueva forma de consumo que además contaría con el control de su composición.