Chaco es la provincia en la que más creció el crédito productivo en el último año, según revela el informe del Banco Central de la República Argentina (BCRA). De acuerdo al organismo nacional, el crecimiento interanual al comparar el primer trimestre del 2022 con igual período del 2023 se sitúa en el 28%. Los datos extraídos del BCRA y publicados en su página web, muestran un fuerte crecimiento del crédito productivo en el Chaco, sostenido por el trabajo en conjunto que se viene realizando desde las distintas instituciones de la provincia reguladas por el BCRA, Nuevo Banco del Chaco S.A. y el Fondo de Garantías del Chaco (Fogach), mediante una sinergia que permite facilitar el crédito a las pymes en la provincia.
“Que Chaco lidere este ranking es el producto de dos factores principales. El primero es la capacidad de los empresarios para demandar crédito para el crecimiento y la segunda es de las políticas públicas implementadas. En el caso particular del Chaco, un Banco Público solvente y con capacidad para prestar al sector privado y el Fondo de Garantías del Chaco (creado en el 2013)”, destacó Adrián Atanasoff, gerente general del Fondo de Garantías de la provincia del Chaco (Fogach).
De hecho, este Fondo de Garantías de la provincia de Chaco, fue el segundo en crearse en la Argentina. “Esto muestra la importancia de innovar el sector público, dado que si bien a veces estos procesos llevan su tiempo, cuando se empiezan a obtener los resultados, se evidencian ventajas competitivas respecto a otras regiones del país a la hora de obtener financiamiento”, amplió el gerente general.
Por su parte, el presidente del Nuevo Banco del Chaco SA, Federico Muñoz Femenía aseguró que la banca provincial apoya al sector productivo: “El NBCH SA tiene un rol relevante dentro del sistema de créditos productivos que se ve reflejado en el informe que elabora el BCRA y que tiene que ver con una político pública establecida en el Plan 2030 que impulsa el gobierno provincial”, manifestó.
El informe del BCRA proporciona una visión detallada de los saldos prestados a cada actividad al final de cada trimestre. “Es natural que las provincias que se enfocan en mejorar el crédito a las pymes, no sólo con instrumentos directos, sino también con mejorar los trabas burocráticas, los procesos y las asimetrías que tiene el sistema financiero argentino, lo mejoren”, agrega Atanasoff.
Así, comenta que una herramienta fundamental para mejorar el indicador de crédito para cualquier provincia “es tener un fondo de garantías”. “Es por ello, que las provincias que lideran el ranking mencionado, en su gran mayoría cuentan con un fondo de garantía o están en proceso de implementación de su fondo de garantía (NdR: nueve de las 10 provincias que encabezan el ranking cuentan con un fondo de garantía o se encuentran en procesos de implementación del mismo)”, ponderó.
Finalmente, Atanasoff destacó que mejorar los indicadores de crédito PyMe “no es fácil en Argentina, por una multiplicidad de factores”, “Más, en provincias que se encuentran alejadas de los grandes centros productivos, dado que el centralismo financiero nacional, limita en demasía que el crédito se desarrolle de manera simétrica en todas las provincias del país, por lo que considero que es un gran logro del trabajo conjunto del sector público y privado de la provincia liderar este ranking”, concluyó.