Entre sus bases, el concurso postulaba que las construcciones debían constituir una relación abierta, amigable y cercana con el resto de la ciudad, con integración del tejido urbano actual, mediante la eliminación de barreras y con una identidad representativa que contemple y ponga en valor la memoria de la ciudad. La idea del pabellón deberá contemplar que en el mismo pueden desarrollarse diversos tipos de actividades, recreativas, deportivas, culturales, ferias, etc.
Los arquitectos Ezequiel Salas y Damián Capuyá, docentes de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), obtuvieron el tercer premio con su propuesta: un pabellón de 55 metros de largo por 14,50 metros de ancho con un hito alegórico al Bicentenario, como símbolo destacado del proyecto, representado por un anillo de vegetación nativa que generará un ecosistema propio.
El concepto buscado en este espacio de vegetación con forma de anillo es representar a la naturaleza como parte de la cultura local, una naturaleza que estaba antes de la civilización y es a la que se rinde homenaje. El Hito del Bicentenario contendrá especies nativas litoraleñas: Juncos; Achira Roja; Jazmín de Bañado, Raphis Excelsa, Naranjo, Lapacho; Sarandí Blanco; Tipa y Stipa entre otras.
El diseño buscó enlazar un recorrido que se inicia en el río (protagonista fundamental de la ciudad), sigue con un eje de acceso al predio y remata en el Hito. Un elemento de hábitat característico que se destacó en el proyecto, es la “galería” como un espacio simbólico dentro de la cultura de la región. Los proyectistas pensaron –en ese sentido-una gran galería en el paisaje ribereño.
El pabellón planteado permite, por su escala y su forma, gran variedad de funciones. Se adaptará –según los profesionales- a Exposiciones; Ferias; Conciertos Musicales y otras actividades culturales que la ciudad o los vecinos deseen llevar a cabo.
Como parte del proyecto y así estaba formulada la convocatoria, el pabellón estará dentro de un parque que tendrá su protagonismo y donde se priorizará la vegetación y la sombra. Fue pensado con un sendero orgánico en donde se instalarán equipamiento recreativo, deportivo y lúdico para todas las edades.
Otra de las ofertas dentro de este parque, será el sendero aeróbico que estará diseñado en todo el perímetro del predio. El proyecto se completa con una serie de servicios, como estacionamiento, un bar y sanitarios.
Para el Sistema Estructural del Pabellón, los arquitectos pensaron en un material novedoso: la madera laminada encolada estructural. La madera será provista por productores regionales, utilizando productos de plantaciones certificadas. La característica de la madera a utilizar es básicamente dura, apta para su durabilidad, bajo mantenimiento en el tiempo y su capacidad de resistencia.