El plástico pasó a ser un material prácticamente ineludible en la vida cotidiana, tanto por su versatilidad como por su infinidad de usos. Tan naturalizado está que poco reflexionamos sobre la degradación y sobre cómo afecta al medio ambiente.
Sin embargo, un grupo de personas pensó en un pequeño cambio para hacer un gran aporte. Bajo el nombre Meraki, comenzaron a comercializar un cepillo de dientes fabricado con madera de bambú, 97% biodegradable y cuya vida útil y precio es igual a los cepillos convencionales.
“Todo empezó en un viaje. En medio de un paisaje paradisíaco miré a mi alrededor y me di cuenta la cantidad de plástico que había en el lugar. Pensé en darle un giro al material de los cepillos de dientes porque la limpieza bucal es un hábito, y con pequeños cambios, aportamos al medio ambiente”, comenta Francisco Mirabella, director de Meraki y licenciado en Ciencias Ambientales.
El cepillo está fabricado con madera de bambú y sus cerdas son iguales a cualquier otro, “para otorgar la misma calidad de lavado y vida útil”. Al igual que los que conseguimos en el supermercado, vienen de cerdas suaves, medianas o duras y también ofrecen un modelo para niños, con el objetivo de que, desde temprana edad, los más chicos se comprometan a aportar un cambio sustentable. El precio sugerido para la venta al público es de $ 95. En este sentido, el director de Meraki resalta: “Queremos que el cepillo sea accesible en el mercado, porque la idea es educar a todos los consumidores y no sólo a un grupo”.
Actualmente, el producto se vende en más de 500 puntos de venta en todo el país, incluyendo Uruguay, y a través del ecommerce, vía su página oficial.
Si bien el producto fuerte de la marca son los cepillos de dientes, los responsables de Meraki apuestan al crecimiento y a la diversificación. “Nuestro objetivo es crear una gama de objetos que sean sustentables. Actualmente estamos en la etapa de desarrollo avanzado para comercializar peines, cepillos de baño, para limpieza de uñas, entre otros productos”, detalla Mirabella y adelanta: “Creemos que podrán salir al mercado a mitad de año”.
Los números
Con casi dos años de vida, Meraki gozó del crecimiento ininterrumpido. En 2017, fueron 50.000 las unidades vendidas, mientras que, en 2018, se registró una venta de 80.000 cepillos de dientes, incluida Argentina y Uruguay.
La facturación fue, lógicamente, proporcional al aumento de las ventas. Merakifacturó $ 2 millones durante su primer año, mientras que proyectan cerrar el balance 2018 con una facturación de $ 2,7 millones.
El compromiso de los responsables de la marca con el medio ambiente se traduce además en las ganancias. En este sentido, pactaron donar el 1% de los ingresos a una ONG que se vincula con proyectos sustentables. “La ONG internacional se llama One Percent For The Planet (1% por el planeta). Tiene que ver con una nueva forma de concebir la filosofía empresarial. Las compañías donan el 1% de lo recaudado a la ONG, quien destina los fondos a fines ecológicos, sustentables, sociales y ambientales de todo el mundo”, concluye Mirabella.